En el secreto de los naranjos en Sevilla vamos a intentar dar luz a una de las cosas que más sorprende al viajero que llega a Sevilla, y es la multitud de naranjos, más de 40000, que existe en la ciudad. Además, este árbol se ha convertido en una parte importante de nuestro decorado urbano. El nombre técnico de este tipo de estos naranjos es citrus x aurantium y promueve de la familia de las Rutáceas y es un híbrido entre la citrus máxima y citrus reticulada.
Normalmente cuando alguien ve las naranjas en las calles de Sevilla la primera intención es cogerlas para poder comerlas, pero en este caso siempre sale la frase: no las cojas son bordes. En efecto, todas las naranjas de la ciudad son amargas y al recolectarse se venden por el ayuntamiento. ¿Pero por qué alguien compraría naranjas amargas?.
Pues, por diferentes motivos, uno poder hacer mermelada, la deliciosa mermelada de naranja amarga es una de las delicias que se consiguen gracias a nuestros naranjos y son muy apreciadas en diferentes países. A través de nuestra web tenéis la oportunidad de disfrutar de esa exquisitez, de hecho, hasta existe algún convento especializado en realizarlas como el Convento de Santa Paula.
Aunque hay unas naranjas que se usan para mermelada hay unas que no podréis disfrutar, son las que existen en el Real Alcázar, ya que con ellas se realiza la mermelada que tomará la reina de Inglaterra. Tenemos que recordar que hubo una reina española: Victoria Eugenia, que procedía de las islas británicas y que vivió muchos años en Sevilla donde conoció las bondades de las frutas que se cultivan en estas tierras. Aunque se piensa que los ingleses se aficionaron a ellas en el siglo XVIII, las utilizaban en los barcos para conservación y así evitar el escorbuto. La tradición de enviar las naranjas a la Casa Real inglesa se perdió y se ha recuperado en los últimos años, el envío se realiza a través el Embajador Británico en España.
Pero también este fruto amargo se usa para un elemento cada día más apreciado en el mundo occidental: la Ginebra. Especialmente las grandes firmas inglesas de esta bebida se congratulan y presumen en sus etiquetas de estar realizadas con la riquísima naranja sevillana, que le da un toque único de calidad. A tanto ha llegado esa devoción por esta fruta que nace en las calles de nuestra ciudad, que famosas marcas como Tanqueray ha realizado una bebida dedicada exclusivamente a Sevilla: Tanqueray Flor de Sevilla, tanto esta como otras marcas locales podéis disfrutarlas en nuestra web.
Otra parte de la producción se lleva a destilerías que fabrican aceites esenciales y fragancias. Esas colonias que venden ese inigualable aroma a Sevilla y que también podéis encontrar muestras en las colonias de nuestro catálogo.
Pero no todo es tan mágico ya que una de las partidas de las naranjas se usa para alimentar ganado caprino. Pero nuestra ciudad quiere estar a la última en energías renovables y si podemos utilizar un fruto que proviene de nuestros árboles mucho mejor, así que se está convirtiendo en los últimos años los azúcares del zumo de naranja en biogás, y ya el 95% del centro de gestión de aguas residuales del Copero se abastece de esta energía limpia y natural que nos deja la naturaleza de la ciudad.
¿En qué época se ponen los naranjos en Sevilla?
Los naranjos amargos llegan a Sevilla de la mano de los musulmanes que conocían las posibilidades de este increíble árbol y que llega a Sevilla a través de la ruta de la Seda; y en la época árabe se usaban en la ciudad como elemento ornamental. De hecho textos del siglo XI hablan de ellas y no para bien pues dicen que las naranjas amargas traen mala suerte.
Cuándo comienza la expansión de naranjos en las calles de Sevilla.
La gran expansión del naranjo por toda la ciudad comienza en el siglo XIX, y tiene mucho que ver con las reformas que se hacen en esa época y se afianzará con motivo de las Exposición Iberoamericana de 1929 que perfil la ciudad tal como la conocemos hoy en día.
¿Cuántas naranjos hay en Sevilla?
La ciudad posee más de 47000 naranjos en sus calles, que no es una cifrá despreciable, algunas estadísticas dicen que más del 25% del arbolado son naranjos.