1- El Real Alcázar
El Palacio Real, el más antiguo de Europa aún en uso, ocupa el primer puesto de este listado. Estamos ante lugar desbordante en belleza, donde, aunque su origen fue islámico sólo tenemos de aquella época un patio que no está en el mejor estado posible: El patio del yeso.
Su historia nos habla de momentos básicos para la historia del país, como la creación en su interior de la Casa de Contratación en la época de los Reyes Católicos, el nacimiento del príncipe Juan o la boda del Emperador Carlos.
De sus palacios destacamos el mudéjar y el gótico, donde dos reyes destacan sobre el resto Pedro I y Alfonso X. De hecho, aún podemos imaginar resonando la música de las Cantigas que fueron realizadas en este bellísimo enclave.
Tampoco podemos olvidar sus 70000 metros cuadrados de jardines, divididos por la Galería de los Grutescos, obra del italiano Vermondo Resta.
2- La Casa de Pilatos
La Casa de Pilatos es otro de los lugares señeros y especiales de Sevilla, el mudéjar, el Renacimiento y el Arte clásico representado por sus esculturas; nos evoca la época de mejor esplendor de la ciudad. Dentro de su trazado debemos destacar su patio principal, una auténtica obra maestra, la escalera principal donde su techo imita la bóveda de media naranja del Alcázar; su capilla y sobre todo sus jardines, con aire italianizante donde Pedro Tortelero realiza logias, cuevas… que hacen que este lugar tenga un carácter muy especial. No olvidar el jardín pequeño con el bronce realizado por Mariano Benlliure que se mezcla con la vegetación y las esculturas clásicas traídas del Reino de Nápoles, donde fueron virreyes los duques de Alcalá, repartidas por todo el edificio.
3- El Palacio de las Dueñas.
El palacio de Dueñas es una de las grandes joyas de la ciudad, abierto al público en fechas recientes, tiene la singularidad de ser el único de los grandes palacios de Sevilla donde da la sensación que aún se vive en sus estancias, las cuales se encuentran intactas de como las dejó la duquesa Cayetana, cuya impronta se puede respirar en todo el inmueble: vestidos, mantones…
Además, en el patio de los limoneros imaginamos a un niño llamado Antonio Machado recorriendo sus estancias. Su esplendido patio principal con un gran laurel de California y sus yeserías con sirena son también una de las señas de identidad de este bello edificio.
A destacar la capilla con una pintura excepcional del Renacimiento italiano, y las diferentes estancias con obras maestras de artistas tales como Ribera, Aníbal Carracci, Luca Giordano.
No debemos olvidar sus tapices donde destaca uno realizado por Willem de Pannemaker y la escultura de bronce de Benlliure “La Pinrrelitos”, ubicada en el salón de la Gitana.
4- Palacio de la Condesa de Lebrija
Este singular palacio presume de tener el mejor suelo de toda Europa, ya que su solería en su planta baja es casi exclusivamente mosaicos romanos de Itálica.
Además de ellos también posee los azulejos del Convento de San Agustín, uno de los grandes cenobios que existían en Sevilla y la escalera del palacio ducal de Marchena con su fabuloso artesonado.
De todos los mosaicos destacamos el que se encuentra en el patio central, obra excepcional del Arte romano, encontrado en la ciudad romana de Itálica junto con otros dos en una finca que acabó comprando la Condesa, aunque el mayor que es el que se encuentra en el palacio consiguió ponerlo donde deseaba.
Además, en todo el recinto encontramos interesantes obras árabes, precolombinas. La visita se completa con una visita guiada a la parte superior, donde se encontraba la vivienda y que conserva capilla, salones y comedor tal como eran originariamente.
5- Palacio de los Marqueses de la Algaba
Este singular palacio ubicado en el centro de Sevilla posee una excepcional portada mudéjar con alero en la parte superior y un interesante juego de ventanas geminadas rodeadas por un alfiz. Otro elemento a destacar es la decoración mudéjar que posee debajo del antiguo balcón de los marqueses.
Los señores de la Algaba dejaron su torre medieval en la localidad sevillana para construir este edificio, donde además de la fachada destacamos su patio, en cuyo centro se encuentra una fuente con cerámica. La gran escalera y una sala (Leonor) donde se conserva el originario artesonado del siglo XVI.
En el interior alberga un interesante museo dedicado al Arte mudéjar con diferentes piezas e imágenes de diferentes edificios básicos para entender este arte en la ciudad.
Aunque en la ciudad existen muchos edificios señoriales pensamos que estos son los 5 mejores palacios para para visitar en Sevilla.